Buenos días.
Se acercan las fiestas navideñas y con ellas la locura de los regalos. Con los pocos años de maternidad que llevo ya he aprendido que los juguetes no son un buen regalo (me refiero a los juguetes típicos que salen en los anuncios de televisión); juegan dos veces, la mayoría de las veces ni siquiera estimulan su imaginación y enseguida se cansan de ellos. Así que en nuestra familia no se suelen regalar juguetes de los que se publicitan en la TV y se venden en grandes almacenes. ¿Qué les regalamos nosotros a nuestros pequeños? Pues de eso voy a hablaros hoy; os voy a dar unas cuantas alternativas que seguro que les van a encantar y les van a sacar más jugo que a una pistola.
Lo primero son los disfraces. El año pasado los Reyes Magos les trajeron un disfraz de Spiderman a cada uno y fue todo un éxito, Javi se pasó todo el invierno con el disfraz puesto, en el colegio de su hermano le conocían por Spiderman.
Son de H&M y cuestan alrededor de 25 € cada uno. También hay de Tortuga Ninja, Hulk, Thor y Iron Man (este cae estas Navidades). Son geniales porque lo de los músculos les hace mucha gracia.
Otros de mis juguetes preferidos son los materiales no estructurados, en realidad mi preferido. ¿Qué son los materiales no estructurados? Pues esas cosas con las que todos hemos jugado de pequeños en la calle (piedras, palos, piñas, conchas) y en casa (cartones, tapones, corchos, telas) y que no solo dan muchísimo juego sino que además estimulan la imaginación de los niños y de los adultos también (si os sentáis a jugar con ellos) y aportan muchísimos aprendizajes. Pero no os asustéis que no somos tan tacaños. Hoy en día cada vez hay más marcas que fabrican materiales no estructurados preciosos y con acabados excelentes; por ejemplo, Grimms. ¡Adoro esa marca!
Materiales no estructurados de la marca Grimms
Siguiendo con Grimms, tengo que reconocer que me vuelve loca todo el material Waldorf, pedagogía desarrollada por Rudolf Steiner. Mis hijos tienen el Arco Iris grande y no se si les gusta más a ellos o a mí. Se pueden hacer cosas preciosas con esos materiales.
Material no estructurado y Waldorf de la marca Grimms
Otros regalos que les van a encantar y que también son educativos son los juegos de mesa. Los hay a partir de los 2 años, aunque cueste creerlo. Son regalos que les van a ayudar en muchas áreas como la lógico-matemática, lectora, coordinación, cooperación... Son increíbles y no os hacéis una idea de la variedad que hay, desde los más clásicos como la oca o el dominó hasta el juego más de moda, el Camelot.
Otros de nuestros regalos preferidos son los instrumentos musicales, el material artístico en general, los libros y los juegos de roles. En instrumentos musicales hay infinidad de pequeños instrumentos de percusión (panderetas, cajas chinas, triángulos, etc.) con los que se pueden iniciar en el mundo de la música. En cuanto a juegos de roles, observar qué les gusta a vuestros hijos, nietos o sobrinos; si les gusta cocinar, los coches, ayudar en casa, etc. Una cocinita les vuelve locos a todos los niños, una casa de muñecas, una fregona y su cubo, etc. Si estáis alerta, Lidl saca muchas de estas cosas a principios de diciembre a unos precios increíbles, mis hijos lo tienen ya todo: la casa de muñecas, el tren con el aparcamiento, el puerto y el aeropuerto, instrumentos, etc. Y, por supuesto, también están los juguetes de Ikea: la cocinita, el tren (que se puede unir al de Lidl), juegos de mesa, marionetas, el caballete pizarra, etc.
Casa de muñecas de Lidl
La cocinita de Ikea con un armario metálico que hace de nevera
Accesorios del tren de madera de Lidl
Por supuesto, las bicicletas, patines, patinetes, monopatines, etc. son otro excelente regalo.
Y, por último, los juegos de construcción, los LEGO y los Playmobil. Les encantan y las dos marcas tienen sus versiones para niños pequeños: LEGO Duplo y Playmobil 1,2,3. Son de esos juguetes que merece la pena comprar porque los disfrutan y son para toda la vida. Sergio y Javi tienen un cajón enorme de bloques de LEGO Duplo y tengo que decir que es de las cosas con las que más juegan.
Y hasta aquí os puedo contar. Espero que os sirva de ayuda para elegir los regalos de los pequeños de la familia; son de esas cosas que muchas veces se vuelven un quebradero de cabeza porque nos encanta ver su carita cuando un regalo les gusta.